En el vertiginoso sector minorista, mantenerse a la vanguardia significa aprovechar la tecnología para mejorar la visibilidad y el cumplimiento en todas las operaciones de la tienda. La tecnología de reconocimiento de imágenes lidera esta transformación al permitir a marcas y minoristas mantener ventajas competitivas mediante la captura y el análisis de datos precisos y en tiempo real.
El auge del reconocimiento de imágenes en el comercio minorista
La tecnología de reconocimiento de imágenes utiliza cámaras y una capa de IA para interpretar y analizar la información visual de los estantes de las tiendas. Esta tecnología ha revolucionado la forma en que las marcas abordan la comercialización en tienda, la gestión de existencias y el cumplimiento de las normativas. A diferencia de las inspecciones manuales, que requieren mucho trabajo y son propensas al error humano, el reconocimiento de imágenes ofrece una solución coherente, objetiva y escalable. Los avances en el reconocimiento de imágenes en los últimos 5 años indican una creciente dependencia de esta tecnología para el éxito del comercio minorista en el futuro.
Mejorar la colocación de productos y la conformidad
Una gestión eficaz de los lineales garantiza que los productos estén disponibles, visibles y con una presentación atractiva. El reconocimiento de imágenes ayuda a las marcas a controlar las condiciones de los lineales en tiempo real, detectando las roturas de stock, garantizando el cumplimiento del planograma y optimizando la colocación de los productos. Esto es importante: los estudios han demostrado que el cumplimiento adecuado de las normas en los lineales puede aumentar las ventas hasta un 20%, ya que influye directamente en las decisiones de compra.
Mejorar la precisión de los precios
Las discrepancias en los precios pueden provocar pérdidas de ventas y dañar la confianza de los clientes. La tecnología de reconocimiento de imágenes permite a los minoristas controlar los precios en tiempo real, garantizando que los precios en los lineales coincidan con las ofertas promocionales y sean coherentes en todos los establecimientos. Esta capacidad en tiempo real no sólo mejora la satisfacción del cliente, sino que también ayuda a mantener una ventaja competitiva en las estrategias de fijación de precios.
Datos en tiempo real para decisiones en tiempo real
La capacidad de tomar decisiones informadas con rapidez es crucial en el comercio minorista. El reconocimiento de imágenes proporciona a las marcas información inmediata sobre las condiciones del mercado, las actividades de la competencia y las preferencias de los clientes. Esta inmediatez permite actuar con rapidez, desde ajustar las estrategias de marketing hasta resolver los problemas de existencias, minimizando así la pérdida de ventas y maximizando las oportunidades de ingresos.
Caso práctico: Aumento de la eficacia y la precisión
Un cliente de Wiser, líder en productos de gran consumo, implantó la tecnología de reconocimiento de imágenes y observó una mejora del 30% en los índices de cumplimiento y una reducción del 25% en las roturas de stock en los seis primeros meses. Estos cambios se tradujeron en un notable aumento de la satisfacción de los clientes y un notable incremento de las ventas.
Conclusión
A medida que el comercio minorista sigue evolucionando, la adopción de la tecnología de reconocimiento de imágenes ya no es opcional, sino una necesidad para las marcas que desean prosperar en un mercado competitivo. Al proporcionar datos detallados y procesables, el reconocimiento de imágenes permite a las marcas ejecutar sus estrategias minoristas con precisión y confianza.
Cómo puede ayudar Wiser
La plataforma In-Store Execution de Wiser integra tecnologías punteras de reconocimiento de imágenes adaptadas específicamente a los fabricantes de marcas CPG. Nuestras soluciones ofrecen una supervisión en tienda automatizada y sin fisuras, garantizando que sus productos tengan un precio, una ubicación y una presentación acordes con los estándares más exigentes. Con Wiser, las marcas no sólo pueden cumplir con las exigencias de ejecución en el punto de venta, sino también gestionar de forma proactiva su presencia en la tienda para impulsar el crecimiento y mejorar la experiencia del cliente.
